Recordando el café
al abrir la cafetera, ya vacia.
Un olor, a café ya tomado,
me recrea en recuerdos
que mi mente proyectan
como los clichés de una película
ya en blanco y negro.
Recuerdos de una casa,
de una familía, de risas,
de momentos compartidos.
Mi boca se ensancha
en una libre sonrisa
y en mi corazón
sensación de bienestar.
Y pienso que......
voy a preparar otra cafetera.
Comentarios
Preciosas letra Maria, que bueno que hayas decidido compartirlas.
Gracias de corazón....te sigo.