Dame la vida...

Necesito la libertad que mi corazón ansía… esas alas que solo crecen cuando tu alma roza la mía… Es tu sonrisa la que busco en mis días… y tus caricias las que me mantienen dormida… No puedo seguir con esta vida fingida, que sólo me da lejanía… Mi cuerpo camina ahora inerte, sin un alma que lo sustente… esa, vaga perdida entre la realidad y la muerte… cuando me asola el miedo de no volver a verte… Y solo busco la manera de sentirte… o a caso debo reprimirme… Olvidar tu imagen, los abrazos que vienen a vestirme… Prefiero seguir dormida, entre mi cuerpo y lo que me da la vida…

Comentarios

J.Garés Crespo ha dicho que…
Me encantan tus reflexiones, no sé muy bien, formalmente, donde encajan. Supongo que da igual...lo interesante es que llegan.
Misión cumplida, ¿no?.
Un abrazo cordial..
Maria Tortosa ha dicho que…
Si llegan lo es, aunque no puedas encajarme en un estilo...

Otro abrazo para ti Jose.

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